La parte mas dura fue tener esta semana libre, así que ahora aprovecha al máximo tu tiempo en la montaña.
1. Renueva tu equipo:
No te lleves tu equipo de hace 10 años y pienses que va a funcionar bien. Llevar buen material te facilita y mucho el aprendizaje mucho mas de lo que crees, va a estar el ski mas vivo, mas activo… No hace falta que lo compres siempre se puede alquilar o utilizar unos de “demo”.
Al igual que las botas, tienen que ser cómodas y si llevan mas de 150 días deberías cambiarlas…
2. Ponte en forma
Si puedes llevar a cabo un plan de entrenamiento antes de tu viaje será todo un triunfo y sacarás aún mas rentabilidad al pase cada día. Céntrate en piernas y lumbar y podrás conseguir tener bajadas épicas, te recuperarás antes día tras día y tu esquí será mas agresivo.
3. Crea un plan
Mucha gente planea mas donde cenará a que hotel irá o el «apreski» que el propio día de esquí. Es un gran error. Planifica tus objetivos de la semana, rutas y técnicas a depurar día a día para llegar al final de la semana con unos objetivos de mejora cumplidos.
4. Tómatelo tranquilo
Mucha gente llega con tantas ganas y quiere hacerlo todo tan corriendo que el primer día dan mas de lo que están preparados exponiéndose a posibles lesiones, y a estar en peor forma para los días siguientes. Debe ser una evolución en la intensidad del esfuerzo a lo largo de tu semana para evitar este tipo de problemas. Siempre de menos a mas. Empieza por lo mas sencillo y ve añadiendo dificultad.
5. Aléjate del freeride (de momento).
Si llevas tiempo sin esquiar te recomendamos los primeros días no meterte fuera pista, ya que te puede ocasionar problemas de rodilla u hombro. Si vas fuera acuérdate siempre de ir acompañado, conocer por donde vas y equiparte de pala, arva y sonda.
6. Reserva clases de esqui.
Puedes pensar que no es muy económico, pero te hará mejorar y disfrutar de tu esquí y de la montaña mucho mas, por lo que el dinero invertido esta mas que rentabilizado en la mejora que tendrás en tu nivel.
Consejos: El instructor te enseñará y aprenderás técnica que practicarás con él y tambien cuando esquíes a tu aire seguirás practicando las correcciones.
Guía: Te llevará donde están las mejores condiciones, conocerás nuevos lugares de la montaña y tus zonas preferidas ya sean baches, freeride, freestyle… las opciones son infinitas.
7. Conoce tu equilibrio.
Encontrar tu equilibrio y tu posición optima es muy importante para la mejora de tu técnica, practica diferentes radios de giro, cambios de ritmo, pesos, encuentra tu posición correcta y cómoda para afrontar cada bajada. Grábate y repasa los videos por la noche te ayudarán a asimilar y progresar mucho mas.
8. Bebe agua.
Es muy importante estar bien hidratado, además se suele acompañar los apresáis y cenas de alcohol y en altitud se multiplican sus efectos así como puede ocasionar fatiga y males de altura. Mantén tu cuerpo lo mas hidratado posible y lleva contigo algo de agua siempre, también es importante por seguridad ante un problema, chocolate y frutos secos que te proporcionan energía instantánea también son claves. Y come muchos hidratos de carbono sobre todo en las comidas y proteínas para cenar, al día siguiente estarás a tope.
9. Conservate a ti mismo.
Cuando te sientes sin fuerzas descansa. Siempre puedes hacer una parada y reponer fuerzas, no tienes que llegar al punto de sentirte mal o agotado, corta antes de ese momento, al final de cada bajada debes sentirte bien y no como un saco de patatas. Y estira después de cada día de esquí, al día siguiente estarás mucho mejor fisicamente y evitaras lesiones.
10. Dalo todo.
Esta claro que siempre quieres volver a casa con una buena historia que contar, enfréntate a tus miedos y ponte a prueba cuando llegue el momento correcto. Así que planifícate esa bajada que siempre has querido hacer, y cuando llegue el momento ve a por todas. Será prueba de unas vacaciones bien aprovechadas.